El jueves 6 de julio se brindó este interesante Taller en el Punto Violeta de la ciudad de Sauce Viejo, auspiciado por la Concejala peronista, dirigido principalmente a pequeños agricultores y huerteros. Estuvo a cargo del Ingeniero Agrónomo Alejandro Montenegro, quien se refirió a los avances de la tecnocracia que privatiza los beneficios, los que “nos interpelan a construir nuevos caminos para la agricultura, que nos permitan producir alimentos vitales al servicio de toda la gente. “El desafío nos convoca a vencer la desazón y la sensación de impotencia -prosiguió el experto- para pasar a la acción y así responder a las necesidades del mundo y de la tierra. Se trata de desarrollar la cultura del aprecio”. “La agricultura biodinámica nos enseña que, en armonía con las otras agriculturas, a través de la vinificación de la tierra es posible cultivar alimentos sanos que pueden nutrirnos" explica el ingeniero, por medio de la experiencia teorica y práctica desarrollada durante casi 100 años por esta forma de agricultura, al servicio de las comunidades. Algunos datos, como por ejemplo la gran cantidad de agricultores sin la tenencia segura de la tierra, así como del carácter urbano de la mayor parte de la población, nos generan interrogantes sobre cómo podemos contribuir para que haya alimentos frescos y vitales, disponibles y accesibles para la mayoría; y también la convicción sobre la necesidad de generar espacios de reflexión y de acción para encontrar mecanismos que resuelvan las problemáticas. En nuestra evolución, en el paso de la la alimentación para la subsistencia, de recolectores y cazadores, a agricultores, aprendimos que existen ritmos en la Naturaleza y que, si nos integramos en armonía con ellos, estaremos conectados a la abundancia. Así surgieron los calendarios agrícolas. “Hoy recuperamos el Calendario Biodinámico -sintetizó la parlamentaria sauceña- porque la sabiduría ancestral de nuestros abuelos está viva y se expresa en leyes universales naturales que dicho Calendario -basado en la astronomía- atesora y resguarda, y que debemos hacerlo llegar a todos los rincones aprovechando las herramientas que hoy tenemos”. La concejala Rodríguez agradeció al Ingeniero Montenegro y al Punto Violeta, que hicieron posible el Taller que permite potenciar la huerta a través del aprendizaje de aspectos relacionados con los ritmos de la Naturaleza a lo largo del año, del mes y del día; el ritmo anual del sol; los ritmos lunares; el ritmo diario de la tierra y la influencia de las doce constelaciones que se agrupan por sus cuatro elementos: Fuego, Aire, Agua y Tierra. “Esto nos brinda indicaciones para orientar el trabajo con la tierra y las plantas: cuándo y qué sembrar; cuándo cortar, cosechar y/o podar; cómo abonar el suelo; todo ello, siempre, en clave de optimizar la reproducción de la vida en condiciones de calidad adecuada para la felicidad, citando una frase del Ing. Agrónomo y profesor de Agricultura Biodinámica, Antonio Latuca: “todas las personas podemos ir a la agricultura, porque integrar a los seres humanos en la agricultura es integrar la agricultura en la naturaleza” concluyó Romina.